Como preámbulo a que fueran apagadas definitivamente las luces que durante 12 días iluminaron los cielos de Ciudad Juárez y El Paso, se dio a conocer el legado del Sintonizador Fronterizo.

Acompañado por los equipos de trabajo binacionales, el artista Rafael Lozano-Hemmer dio a conocer que ese legado se compone de tres elementos: un archivo multimedia de 600 horas de duración que alimentarán los contenidos de Sintonizador.net; la donación de la pieza denominada Corazonadas Remotas (Remote Pulse) y la integración de un fondo de apoyo a los artistas de la región por un monto de diez mil dólares.

Esas 600 horas de grabación de las expresiones de los fronterizos (poetas, músicos, actores y ciudadanos comunes) son «el oro de este proyecto«, dijo el artista, quien reiteró que se trató de una plataforma cívica que en ningún momento recibió fondos públicos, sino sólo de entes filantrópicos (en ambos países), y que por otra parte los gastos arrojaron un «déficit grande».

Cada jornada durante 12 días, el inicio era una activación, y en la clausura estuvo a cargo de Las Platicadoras, un colectivo binacional de activistas, quienes lanzaron un manifiesto feminista en pro de los migrantes y en contra de las políticas de la administración Trump, marcadamente la separación de las familias y el muro fronterizo.

La lectura de ese manifiesto, alternadamente en Ciudad Juárez y El Paso, fue en perfecto espanglish.