Como cada año desde el 2011, miles de parejas dieron el paso más significativo de sus vidas en común precisamente en el Día de San Valentín.
Un poco más de tres mil fueron las parejas que se unieron en matrimonio civil en una ceremonia masiva realizada en el Gimnasio Universitario.
Así, las y los juarenses refrendaron un compromiso que en muchas ocasiones ya habían asumido al iniciar vida en común y que en incontables casos ya había dado fruto con hijos, nietos y hasta bisnietos.
Así, hubo desde adolescentes (la edad mínima legal para contraer matrimonio es de 14 años en la mujer y 16 en los hombres), personas maduras y hasta de la tercera edad.
Aunque por lo general las parejas tenían edades similares, hubo casos en que la brecha de edad era de 25 o más años.
Algunas parejas visitieron con formalidad para la ocasión, pero otras portaban atuendos del diario.
Con el nerviosismo propio de dar el paso, pero radiantes de felicidad (sobre todo ellas), se encontraban los contrayentes en el inmueble proporcionado -como en cada ocasión- por la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez.
La ceremonia fue oficiada por el gobernador, en ejercicio de las atribuciones que le confieren las leyes. El mandatario dio lectura a un documento que, en sustitición de la Epístola de Melchor Ocampo -ya en desuso desde hace tiempo- recalca la igualdad del hombre y la mujer ante las leyes, y a que la convivencia entre ambos en el seno del matrimonio debe ser en ese mismo sentido y que las tareas inherentes al ámbito familiar deben ser compartidas.
Primero ellos y luego ellas (con mayor enjundia), a una sola voz contestaron la pregunta de si deseaban contraer matrimonio. Una lluvia de confeti cayó sobre todos cuando las parejas sellaban su unión formal con un beso.
En forma simbólica, las autoridades entregaron sus actas de matrimonio a cinco parejas. En un caso, el esposo entregó allí el anillo a su ahora esposa.
Otra lluvia, pero esta vez de regalos por parte de las autoridades estatales y municipales (incluidos dos automóviles nuevos y vales de despensa por cinco mil pesos cada uno), siguió en la parte final de evento, que concluyó con un programa musical y un refrigerio para los contrayentes (parece que faltó el pastel).
Fotos: Raúl Lodoza, Gabriel Cardona/Gobierno del Estado de Chihuahua.















