La obra colectiva de jóvenes artistas juarenses, realizada en uno de los principales cruceros de la ciudad, no existe más. Fue literalmente borrado del mapa urbano.

Se trata de un mural que llevaba por título, precisamente, “’¡Juárez!”, y que fue borrado por cuadrillas de trabajadores de un contratista del gobierno municipal que desde hace varios días llevan a cabo la limpieza de las estructuras de varios puentes elevados, sin tomar en cuenta que había pintas que debían ser preservadas.

El hecho ya fue denunciado a través de las redes sociales por algunos de los artistas que habían participado en la elaboración del mural, como el colectivo, que en su muro de Facebook manifestó lo siguiente:Seis Cinco Seis Comics

Sólo espero que haya una buena razon que justifique el que hayan borrado este mural realizado con apoyo del Consulado de Estados Unidos en Ciudad Juárez, CASA Promoción Juvenil AC, 656 Cómics, Colectivo Fundamental. Qué necedad de seguir menospreciando el arte urbano, artistas locales, promotores culturales e interventores comunitarios.

La obra en cuestión, de una gran complejidad en los elementos que la conformaban, fue realizada hace casi dos años en el muro sur debajo del Puente Rotario (conocido popularmente como Puente al Revés), y era punto focal de atención de automovilistas y paseantes de la zona. Una más, en el muro norte, corrió con la misma suerte.

No es éste un hecho único relacionado con la destrucción de una obra de arte urbano, que tiene como característica el ser efímero, pero que en los años recientes se ha ido ganando el respeto de las comunidades en todo el mundo. Hace un año, fue borrado un mural de la parte norte de la Biblioteca Pública Municipal Arturo Tolentino, que representaba a un niño tarahumara, que imploraba un libro y medio pan.

En este caso anterior, la obra fue recubierta con una capa de pintura, en tanto que el mural del Puente al Revés fue la pintura fue desprendida mediante la aplicación a presión de arena sobre el concreto. Debe hacerse notar que no sólo los murales, sino toda la pintura que recubría la estructura, fue quitada.

En la memoria colectiva aún están el caso de la enorme Catrina, obra colectiva dirigida por el artista Otto Campbell, en el muro posterior del actual Centro Joyero, en la esquina de 16 de Septiembre y Francisco Villa. Otra obra del mismo maestro –una sirena, obviamente desnuda- se encuentra cubierta por azulejo en el fondo de la alberca de un hotel del Pronaf.

Es de esperarse una explicación por parte de las autoridades municipales, sobre este hecho que ya está generando protestas en redes sociales. (Foto de portada: Seis Cinco Seis Comics)